Una Pascua diferente, y en dos etapas

Redacción

Por 01 de abril de 2020

Huevos de pascua y una família en casa

Las actuales circunstancias que nos está tocando vivir durante estas semanas nos obligan a todos a modificar nuestro funcionamiento habitual, incluidas costumbres y tradiciones. Y la inminente llegada de la Pascua no es una excepción.

Para el sector pastelero, muy especialmente en Catalunya, aunque también en otras zonas de España, la elaboración de las tradicionales monas o figuras de chocolate, que el padrino regala a su ahijado o ahijada, supone uno de los momentos más álgidos de todo el año en cuanto a actividad y facturación.

Ante la imposibilidad de que las familias puedan reunirse esta Pascua y celebrar así la tradición, el Gremio de Pastelería de Barcelona ha puesto en marcha la campaña "Cap nen sense mona" (ningún niño sin mona). Bajo esta iniciativa, la entidad ha reunido a cerca de 200 pastelerías (cifra que va creciendo cada día) para que ofrezcan sus figuras de Pascua a sus clientes sin necesidad de que estos tengan que acudir a los establecimientos. A través de la página web del gremio, los clientes pueden ponerse en contacto con la pastelería de confianza o con la que deseen, y encargar sus monas, que serán entregadas en el domicilio que el propio cliente indique. Así, los padrinos podrán sorprender a sus ahijados aunque no puedan reunirse con ellos como otros años.

Segunda oportunidad

Pero aquí no termina la iniciativa del gremio catalán. Además de la fecha ya marcada en el calendario dentro de la Semana Santa (lunes 13 de abril), la entidad propone que este año se celebre una segunda Pascua el próximo 1 de junio, fecha en la que se espera que las familias y allegados ya puedan reunirse y celebrar esa festividad tan señalada, aunque sea con retraso. El Gremio realizará una campaña a través de los medios de comunicación generalistas para llegar al consumidor, en la que se espera que también colaboren algunas empresas proveedoras del sector.

En definitiva, soluciones creativas que surgen del propio sector para intentar paliar en la medida de los posible una situación difícil, y que como mínimo contribuirán a que ningún niño se quede sin mona este año. 

Cartel sobre la campaña Cap nen sense mona