Los casos pendientes de Raúl Bernal | Pascua 2016 (V)

Tiempo de Pascua tiempo para que Raúl Bernal vuelva a hacernos disfrutar con sus figuras desenfadadas y únicas. Su estilo se ha hecho un hueco en la retina de todos los profesionales del sector, con el que nos ha ganado y del que muchos nos hemos convertido en fanes declarados. Este año, Raúl confiesa que no ha tenido tiempo para preparar una colección tan sólida como la del León Lorenzo y el circo del año pasado. Pero en su amplio repertorio de animales quedaban algunos “casos pendientes” que son los que en esta ocasión por fin han encontrado el camino para pasar del esbozo en lápiz y papel a su sinuosa forma de chocolate.

¿Qué nos queda por explicar del inconfundible estilo de Raúl Bernal y sus figuras de chocolate? La verdad es que poco, más allá de que su fama y reconocimiento atraviesan con más fuerza si cabe las fronteras de nuestro país para ganarse el interés de los chefs pasteleros y chocolateros de todo el mundo. Así lo pudo comprobar en un curso lleno hasta la bandera realizado en la Chocolate Academy de Bélgica donde los asistentes disfrutaron de la particular fauna de este chef natural de Huesca.

La semana que viene tendrá una segunda oportunidad de enseñar idiomas a sus figuras de chocolate, en esta ocasión hará parada en Italia, en Bolonia, donde se ha reservado una sorpresa personalizada para sus seguidores transalpinos, con monas de Pascua tipo pizza (foto), ravioli y gnocchi.

Pero no solo de estilo vive el reconocimiento de un chef, los cursos que como profesor de la Chocolate Academy española y técnico de Chocovic imparte, tienen siempre la voluntad de enseñarlo todo, de mostrar todas las técnicas y de no dejarse ningún truco en el bolsillo. Otra virtud que reluce de su trabajo con las monas de Pascua es la búsqueda de el pragmatismo, con el uso de moldes estándares de huevos y esferas, intentando además jugar con el menor número de tamaños posibles, en pro también de un resultado regular.

Charlando con Raúl Bernal subre su trabajo, viene a cuento recordar que la Pascua y estas monas deben tener presente que su destino habitual es el del público infantil, motivo por el cual su apuesta siempre es desenfadada y colorista. De las figuras que hoy nos visitan tenemos animales recurrentes en el universo de Raúl Bernal, como es el caso de la rana, que en esta ocasión alcanza su tercer modelo, diferente a los dos anteriores.

Mención aparte se merece la tortuga Tomasa, que es uno de los trabajos más personales de este repertorio, en busca quizá de un resultado mucho más elaborado. La colección la completa el perro salchicha Pitch (en honor a la mascota de una compañera de trabajo de Raul Bernal, Mini Von Arend) y que consigue con acierto disolver las fronteras que separan el animal de su símil cárnico, tendréis una buena muestra del resultado en el próximo número de Dulcypas. La rana Mariana, el unicornio Arturo y el oso panda Aitor han logrado su nombre entre los compañeros de equipo que Raúl tiene en la Chocolate Academy.